Jubilados en lucha: "Si no salimos a protestar, nos morimos de hambre en nuestras casas"

Luego de la represión del pasado miércoles 19, convocan a una nueva marcha frente al congreso para este 26.

Jubilados y jubiladas se están congregando cada miércoles frente al Congreso de la Nación para reclamar un aumento de emergencia en las jubilaciones, la devolución de medicamentos, y una prórroga para la ley de moratoria previsional que caduca el próximo 23 de marzo. El pasado 19, en el marco de la movilización, tuvo una una represión con más de 20 manifestantes heridos, periodistas gaseados y dos detenciones.

"El nivel de los haberes de los jubilados se ha ido achicando enormemente", asegura Nora Biaggio, referente del Plenario de Trabajadores Jubilados. Y remarca que las condiciones de vida de este sector etario han empeorado desde la asunción de Milei, especialmente en lo que refiere al acceso a alimentos y medicamentos.

"Este gobierno quiere terminar el trabajo que inició el menemismo, de liquidar la escuela pública por un lado, de quitarnos los derechos como la jubilación, el derecho al despido indemnizado, el derecho a convenio, el derecho a vacaciones", destaca en comunicación con El verano prometido.

Preparativos para la próxima marcha

El miércoles 26 de febrero, los jubilados volverán a salir a las calles. En esta ocasión, se enfocarán en la prórroga de la ley de moratoria previsional, pero también seguirán luchando por la recuperación de sus derechos. Quieren una nueva ley que permita a aquellos que no cumplieron con los 30 años de aportes en blanco seguir teniendo acceso a la jubilación. Además, buscan la implementación de una jubilación universal, independientemente de la situación laboral del trabajador, y que los empleadores que no aportan para sus empleados sean los responsables de pagar impuestos extraordinarios.

A pesar de la represión vivida el pasado miércoles, Nora insiste en que "si no salimos a protestar, nos morimos de hambre en nuestras casas".

En un país donde las tensiones sociales aumentan y los derechos laborales son constantemente amenazados, la lucha de los jubilados por sus derechos sigue siendo una de las más importantes. En un contexto tan difícil, su resistencia y determinación son un ejemplo de cómo, incluso ante la represión, se puede seguir adelante por un futuro más justo.